3 Meses pasan volando!!

Pues si amigos, pasan volando. Y como volando pasan, volando me voy para Sidney el sábado. Pero...antes de explicaros que voy a hacer por Sidney, os explicaré que he estado haciendo esta última semana.

Vereis, al llevar ya cerca de 3 meses en la escuela, me permitieron, cojer una semana libre. Y de esta forma, me puede montar un viajecito por la Isla Norte. Más concretamente por el Parque Nacional Egmont (Mt.Taranaki), y el Tongariro National Park. Dos de los lugares más impresionantes que he visto en mi vida... por el momento!. No solo por su inmensidad, sino también por su simbología y misticismo.

Antes de realizar el viaje estuve intentando cuadrar los días, para no encontrarme con las típicas tormentas neo zelandesas, y más o menos la verdad es que me salió bastante bien. Ya que excepto 2 días, pude gozar de un sol brillante y cálido.

Para llegar al Mt.Taranaki (escenario de la película 'El Ultimo Samurai') me tuve que desplazar a la ciudad de New Plymouth, ciudad surfera por excelencia, donde se realizan la mayoría de las competiciones nacionales e internacionales del Surf. El llegar ahí, fue una aventura, que podía haber acabado mal, pero una vez más la suerte, o tus oraciones mami, consiguieron que todo marchase bien.

Viernes 9 de Abril, cogí el autobus de Wellington, dirección New Plymouth a las 4.30 pm. con llegada a su destino a las 10.30 pm. Tenía una reserva en el Backpacker de la ciudad, pero al llegar me costo bastante encontrarlo y eso que lo tenía cerca de la estación. Pero al ser de noche, no conocer la calles y sumado a que a todo el que preguntaba estaba de fiesta. Me enviaron a la otra punta de la ciudad y no fue hasta que llamé a un amigo que conseguí encontrar el hostal. Mi sorpresa fue, que al llegar estaba cerrado y a pesar de que el barman del pub de al lado intento llamar por teléfono, no conseguí que me abrieran. Suerte del mismo barman, que me encalomó en casa de una mujer que se iba a tomar la ultima copa. Y al final ella y unos amigos suyos, me llevaron a su casa a dormir. Que miedo!! y a la vez que alivio!! no dormir en la calle con el frío que hacía, siempre se agradece. La verdad es que se portó muy bien, me preparó, la habitación de su hija pequeña que no estaba, me explico donde estaba el baño y se despidió de mi por si por la mañana no nos veíamos.

Así fue! a la mañana siguiente, me dirigí hacia el pueblo, y desayune algo y lo primero me dirigí a el punto de información de la ciudad para: 1º preguntar por los autobuses o shuttles, que iban al Parque Nacional, 2º para conectarme a internet y ver si me habían cobrado la noche en el Hostal, para así poder ir a quejarme, 3º para cargar el móvil que lo tenía con la batería un poco baja. Pero al preguntarle a la chica por el shuttle, me dijo que justo en 5 minutos se iba uno con otra persona, así que si quería ahorrarme unos dolares, debía irme en ese justo momento. Me lo estuve pensando, porque me daba la sensación de que iba a necesitar la batería y además, quería quejarme por lo del hotel. Pero al final la chica me convenció, ya que sino iba a acabar perdiendo todo el día. Bueno pues así hice! me cargue el móvil con algo de saldo por si acaso, me compre un mapa del parque y me fui con mi taxista Maorí que ya me estaba esperando en el coche junto con el otro turista.

El otro turista, del que no recuerdo el nombre, iba hacia otro destino, por el cual pasábamos dirección Mt.Taranaki. Una vez lo dejamos a el, estuve preguntándole a mi conductor sobre la leyenda del Mt. Taranaki y muy amable, me la estuvo explicando, y me dijo que para ellos era Sagrada, y que no podían pisarla. De todas formas, el me animo a que yo lo hiciera, diciéndome que me iba a transformar (o sea que iba a ser una experiencia muy positiva para mi) y...os puedo asegurar, que si lo fue.

Cuando llegue a la entrada Norte del Parque,
una Ranger muy amable, me tomo los datos y juntos ideamos cual seria mi mejor ruta. 1 subir a la cima aprovechando el precioso día que hacia, y luego en función de el tiempo dirigirme a una u otra cabaña mas cercana. Para desde ahí en 4 días recorrer todo el parque alrededor del majestuoso Taranaki. Después de de hablar con Joy, que así se llamaba la Ranger, me encamine hacia la cima. El principio, como todos los principios, me lo tome con mucha filosofía y con bastante brío, a pesar de que ya desde el principio, no me encontré con casi ningún tramo que no fuese cuesta arriba. No fue hasta pasada 1.30 que vislumbre la primera cabaña. Punto desde el cual se separaban los caminos. Uno para continuar con el circuito y otro para ascender hasta la cima. En este punto, estuve pensando que hacer con mi mochila, ya que la llevaba cargada hasta los topes para los 9 días y pesaba la hostia, el problema es que no podía pensar mucho ya que al haber empezado no muy temprano, no quería que se me hiciera tarde. Así que...decidí llevarme la mochila conmigo. Aleee!! ahí tus huevos Domi!! Pues vereiswaterproof así que no me preocupaba mucho por si llovía, pesaban así que tampoco no creía que nadie las fuera a cojer y lo mas importante eran GRISES del color de las rocas, así que no era fácil distinguir donde estaban. Tan difícil era, que al bajar, después de haber gozado de unas vistas impresionantes, de una magnifica compañia y de haber sentido una emoción muy grande en el pecho, no las encontré!!! Esta bien, esta bien!! tenéis que entenderme, se hacia tarde, estaba oscureciendo y si para subir era difícil, para bajar había que poner mucho cuidado en no hacerlo rodando. Y a pesar de haber ido observando las rocas donde creía que lo había dejado, en ese momento todas me parecían iguales. Así que decidí, que lo mejor era volver el día siguiente a ver si había mas suerte. Vaya tela eh!!! Pues...al final, las encontré. Eso si, después de volverme a pegar el palizón de volver a subir casi en su totalidad la cima de nuevo (esta vez sin mochila y sin agua) corriendo como el viento. Mas contento cuando recupere mi comida, mmm!! me había estado alimentando la noche anterior a base de sopa y snacks.

A partir de ahí, empecé mi recorrido alrededor de Taranaki y no fue menos impresionante que lo anterior: ríos, valles, riscos serpenteantes, lucha contra los elemento (viento y agua) y amistades en casi todas las cabañas.

No había mucha gente sobre todo a partir del lunes. Pero dio la casualidad de que conocí a una chica Sabine, que estaba haciendo el mismo recorrido que yo y que posteriormente, también se iba a dirigir hacia el Parque Nacional de Tongariro, así que hicimos prácticamente todo el recorrido juntos, y gracias a que ella tenia coche, pudimos movernos mas rápidamente. Gracias Sabine!!!

Al acabar este, nos fuimos hacia Turangi, un pueblo entre el Lago Taupo y el Parque Tongariro. Lo hicimos así porque no sabíamos muy bien como iba a estar el tiempo. De camino hacia Turangi pasamos por la Forgotten World Highway, una autopista que transcurría por unos parajes preciosos, y que nos hizo atravesar la República de Wangamomonha (que no deja de ser un mini pueblito).

Al llegar a Turangi, el backpackers nos sorprendió bastante. La verdad es que estaba muy bien acondicionado y fueron muy amables. Y al día siguiente como hacia un día estupendo nos fuimos, para el Tongariro. Woooowwwwww!!! fue increíble, a medida que me iba acercando iba vislumbrando la montaña de Mordor, esa que tantas veces he visto en 'El Señor de los Anillos' y tantas veces había imaginado. Las fotos se quedan cortas!!! era impresionante, todo en su conjunto, la verdad, pero Nagurohe, que así la llaman los Maoríes. Se salia!!! Después de caminar a lo largo de unas 3 horas, llegamos a la falda del volcán y como no podía ser menos, decidimos escalarlo. Era un poco tarde y estábamos algo cansados, pero era tanta mi ilusión, que me la subí en un periquete (ya van 2, y la experiencia se nota) Nagurohe hace 2.270m y para escalarla, has de atravesar una zona de rocas escarpadas y afiladas, pero con paciencia se puede llegar a la cima. Que pequeño, te sientes mientras están subiendo, hasta te sientes débil e insignificante, pero cuando estas arriba, buff!!!te sientes distinto. Ya os lo dije cuando escale el Taranaki, pero después de esta lo sentí aun mas!! La bajada como siempre, vertiginosa. Pero esta vez la baje cual gacela. jajajaja!!! Si Xavi, dando saltitos de un lado a otro, casi sin ensuciarme las pezuñas. Al llegar abajo, era tanta mi necesidad de seguir explorando, que a pesar de que Sabine me dijo que no continuáramos, yo le dije que iba a intentar acabar el recorrido que me veía capaz de hacer las 3 horas que quedaban en 2.30, antes de que oscureciera. Pues...no fue así!! la verdad es que el viento empezó a soplar con dureza y al no conocer el camino preferí dar la vuelta antes de dar un palo de ciego. Pues veréis, a pesar de que fui bastante rápido, cuando llegue al aparcamiento era absolutamente de noche y no había un solo coche, para volver en autostop. Así que me tuve que ajustar el frontal, y me dirigí a una cabaña, que había no muy lejos de ahí. Si es que no aprendo eh!!! Vaya frió volví a pasar. Claro esta vez no llevaba el saco y aunque hasta bien entrada la noche, la gente de la cabaña habían encendido el hogar. A medianoche, me tuve que levantar a hacer flexiones y sentadillas. Si Loli, como las que te hacia hacer yo a ti! y a ti también Lauri. Te acuerdas?

  

Bueno, como siempre, una aventura, que además no pudo saldarse mejor, que acabándola con un día esplendido, para así poder finalizar mi ruta por el Parque Nacional.

Bueno, alguna anécdota mas tengo por ahí, pero ya os la contaré, que hoy no os podéis quejar eh?

Un abrazo a todos